Caseta d'estiu

Caseta d'estiu

Nuestro estudio asume el reto de reformar una antigua casita de veraneo en una cala de pescadores aunando la autenticidad de la tradición y la frescura de la nueva arquitectura. En esta pequeña cala se respira el ambiente familiar y marinero de siempre, aquí el tiempo parece haberse detenido hace mucho, las casas encaladas conservan las características de la arquitectura tradicional del litoral Menorquín. Buscábamos recuperar el encanto y la comodidad perdidos años atrás sin renunciar a la autenticidad dar respuesta a las nuevas necesidades residenciales y aunar tradición y modernidad.

Las líneas del proyecto estuvieron claras desde el principio, conseguir más amplitud más funcionalidad y una estética más actual, sin denostar los elementos de los años 50, seña e identidad de esta pequeña población costera.

Tras la intervención, la planta baja (donde se concentran las zonas comunes), ha pasado de tener un reparto de espacios poco práctico y sin sentido, a presentar una distribución funcional, armónica y contemporánea, sirviendo a este fin la eliminación de la pared medianera que separaba el porche en dos mitades, también ha ayudado la aplicación de criterios de eficiencia en la gestión del espacio, muebles de obra y disposición de nuevos lugares de almacenamiento (hueco de la escalera y el antiguo cuarto de baño) han sido convertidos en trasteros. El espacio cocina también ha sido objeto de una remodelación profunda, con el fin de dar mayor amplitud y funcionalidad se han abierto huecos en muro, mejorando así la comunicación con el comedor, se ha cambiado el fondo de cocina a 50 cm para ganar en amplitud el pasillo, entre encimera y pared y se ha habilitado una puerta adicional con acceso directo desde el porche, así como una pequeña ventana con vistas al mar, con lo que se ha conseguido una mayor ventilación natural.

El ritmo cromático es otro recursos utilizado en esta reforma, de ahí el uso de tonos claros en puertas, ventanas, paredes y techo, y de maderas nobles de tonos más oscuros como contrapunto en muebles de cocina y comedor, la imagen en conjunto realza la simplicidad y la mediterraneidad.

El diálogo entre pasado y presente, petición expresa de los propietarios, se ha acentuado utilizando en cocina baldosas de pequeño formato en color verde claro, un guiño a la esencia de la casa, y que se repite ésta en baños. Hemos dejando intacta, por su valor emocional, la escalera original de mortero, así como pasamanos y barandillas, obra del bisabuelo de la familia.

En la primera planta se han aplicado idénticas soluciones arquitectónicas y estéticas, del mismo modo que en la planta baja, la distribución anterior, muy fragmentada e incómoda, se ha superado con la unificación y el reparto eficiente de espacios, las puertas correderas, en este caso del suelo al techo dan mayor amplitud a toda la planta.

Resultado de ésta profunda remodelación tenemos una casa de veraneo atemporal y funcional, y estéticamente adaptada al entorno en la que habita desde generaciones pasadas.